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| Mujeres de la Sütsüin Jiyeyuu Wayuu - Fuerza de Mujeres Wayuu en la ceremonia de graduación del Diplomado Mujeres, paz y seguridad |
En una tarde bogotana lluviosa, fría y gris, en el auditorio Camilo Torres de la Facultad de Sociología de la Universidad Nacional de Colombia, se llevó a cabo la ceremonia de graduación del diplomado Mujeres, paz y seguridad: destejiendo la guerra, tejiendo la paz. Este diplomado tuvo una duración de seis meses y se realizó en Santa Marta y Bogotá, simultáneamente, y tuvo como centro la Resolución 1325, que es un instrumento internacional para que las mujeres en medio del conflicto armado o en el posconflicto puedan hacer valer sus derechos tanto como víctimas como constructoras de paz.
La profesora Dora Isabel Díaz de la Escuela de Estudios de Género de la Universidad Nacional celebró, en las palabras de instalación, la culminación de este proceso en el que participaron siete organizaciones que reciben recursos de la organización, de Fokus (que reúne a 70 organizaciones noruegas, especialmente de mujeres) y dos organizaciones invitadas. Los rituales tienen una profunda significación en la cultura humana, es por eso que una ceremonia de graduación es tan especial.
El diplomado estuvo marcado por la diversidad: mujeres indígenas, artistas, afrodescendientes, profesionales, flores otoñales y víctimas del conflicto armado como fue el caso de mujeres desplazadas y madres de víctimas de ejecuciones extrajudiciales, mal llamados falsos positivos. Mujeres todas que desde su contexto le apuestan a una Colombia en paz.
También tomaron la palabra en este espacio Ana Milena González, responsable en Colombia del programa Fokus 1325, Carolina Johansen Coordinadora del Programa Fokus 1325 y Torleif Kveim, Ministro Consejero de la Embajada de Noruega en Caracas.
Es muy gratificante ver cómo mujeres que nunca han tenido la oportunidad de educarse aportan a la construcción del conocimiento académico y nutren su práctica política en un escenario sin par como la Universidad. Que la academia cumpla un papel de fortalecer la ciudadanía de las mujeres a través de una formación que cumplirá una función social es muy importante: permitir el intercambio entre mujeres diversas, tejer amistades, complicidades, aprender y contribuir a de-construir la guerra.
Las estudiantes estuvieron representadas por dos de las graduandas: Soraya Varela en representación de la Costa Caribe y María de Jesús Cárdenas en representación del diplomado en Bogotá. Ambas expresaron gratitud al gobierno y a la cooperación noruega por este espacio de formación para la paz, porque según manifestaron sus sentidos están abiertos de par en par y porque también les permitió enaltecer las diversas culturas que allí confluyeron. Llamaron la atención sobre cómo en las ciudades colombianas se esconde el conflicto armado detrás del discurso de que las acciones armadas son producto de la delincuencia común o de la drogadicción y, a lo sumo, lo que se reconoce como efecto de esta guerra en los centros urbanos es el desplazamiento.
El evento cerró con un recital de la cantautora quindiana Victoria Sur que le cantó al amor, y al desamor, a la paz y a con canciones como Espada de Luna y Los desplazados “los desplazados sin rostros y sin huellas”, nos recuerda que hace casi 50 años vivimos un conflicto que nos desgarra y nos deshumaniza.
Enviado por: Kawalasu Epieyu (Jakeline Epieyu)
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